La actividad turística es una de las industrias más grandes y también volátiles del mundo.
Para Costa Rica representa una base fundamental y estratégica a nivel económico y de generación de empleos. Así mismo, el país ha desarrollado con el paso del tiempo, alternativas de desarrollo turístico, que han convertido al sector en una de las actividades productivas con mayor potencial para integrar el bienestar económico con el respeto al medio ambiente.
Sin embargo, en las últimas décadas ha prevalecido un modelo de desarrollo turístico basado en una fuerte participación del capital transnacional, que ha concentrado la mayor parte de los incentivos y subsidios del Estado costarricense. Este modelo, denominado “megaturismo”, ha funcionado bajo una lógica de “enclave” en algunas de las regiones más pobres del país y ha favorecido poco el desarrollo de los pueblos y comunidades en las que se da una mayor visitación turística.
Esta brecha social se vio potenciada ante el escenario de la pandemia, en el cual el sector turismo fue por mucho, el más afectado, dejando en evidencia las desigualdades sociales a las cuales se enfrentan las diferentes comunidades y sectores productivos que se alimentan de la industria turística. En ésa línea, nuestra agrupación cree en el fortalecimiento de modelos turísticos en los cuales las regiones y comunidades tomen un papel protagónico dentro de un proceso de sostenibilidad turística y socioeconómica, fomentando la participación de empresas autogestionarias y/o asociativas, para propiciar más encadenamientos. De tal manera que las comunidades locales puedan in situ, redistribuir recursos económicos al resto de la comunidad, mediante la generación de empleo, ingresos y prestación de servicios.
Es por esto que desde el Frente Amplio hemos defendido modelos alternativos de desarrollo turístico a través de la reforma y fortalecimiento de leyes que apuntan al Turismo Ecológico, así como al Turismo Rural Comunitario como ejes centrales de desarrollo turístico a nivel nacional. Estos deben ir de la mano con la planificación territorial y planificación turística sostenible para asegurar el correcto manejo de los recursos naturales.
Con el fin de consolidar un modelo de desarrollo turístico verdaderamente sustentable e inclusivo que le lleve esperanza y fortalezca a este sector y sus encadenamientos, desde el Frente Amplio proponemos las siguientes medidas:
- Modificar la integración de los órganos directivos del ICT para establecer la obligación de los cargos gerenciales de ser profesionales en turismo y eliminar el nombramiento “a dedo” y como pago de favores políticos de las personas integrantes de su Junta Directiva. En su lugar, se promoverá la representación equitativa de los distintos subsectores que integran el sector turismo, incorporando al turismo rural comunitario y a las pequeñas empresas turísticas. Su elección será mediante concurso, a partir del establecimiento de criterios de idoneidad. Esto permitiría tener una verdadera representación y con ello conocer las realidades y retos que enfrenta el turismo a nivel nacional, así como las visiones e intereses de los diferentes sectores que participan en la actividad.
- Priorizar el apoyo a proyectos turísticos gestionados desde la pequeña y mediana empresa, cooperativas, asociaciones comunales, de mujeres y otras entidades de la economía social, especialmente aquellos que generen encadenamientos con el resto de las actividades productivas locales con miras a una recuperación articulada del sector. (artesanía, agricultura, pesca y acuicultura, comercio local, comidas típicas, etc).
- Promover la inversión de recursos del ICT en la construcción, reparación y señalización de vías de acceso a destinos y comunidades con alto potencial de desarrollo turístico. Actualmente la infraestructura necesaria para promover el turismo en muchas de estas comunidades (caminos, puentes, muelles y atracaderos públicos, etc.) se encuentra en franco deterioro y abandono. Sin embargo, el ICT no destina recursos a estas obras, a pesar de que su Ley Orgánica lo faculta a hacerlo.
- Fortalecer y ampliar la cobertura de programas de capacitación y formación técnica en materia turística y temas afines, destinados a comunidades locales. Esto con el fin de generar desarrollo de actividades turísticas sustentables, así como encadenamientos con otras actividades productivas, por medio de convenios con el INA, las universidades públicas y otras entidades educativas. De tal manera que se multipliquen las opciones de formación para personas pobladoras de comunidades que se encuentran en las áreas de influencia de sitios turísticos puedan capacitarse y acreditarse en las diferentes ramas del sector.
- Desarrollar de forma inmediata y prioritaria un programa de capacitación y asesoría, dirigido a pescadoras y pescadores artesanales, para que puedan también ofrecer servicios como guías turísticos, operadores de cabotaje turístico y operadores de actividades turísticas temáticas como observación de cetáceos y pesca turística, utilizando sus propias embarcaciones, en la medida de lo posible. Para desarrollar este programa, además de la indispensable coordinación entre entidades como el ICT, el INA, el INCOPESCA y las universidades públicas, es necesario simplificar los trámites para la obtención de permisos y racionalizar los requisitos para que las pequeñas empresas puedan dedicarse a estas actividades.
- Integrar y coordinar la actividad del ICT con los programas de desarrollo rural a cargo del INDER, para promover iniciativas de ecoturismo y agroturismo, en beneficio de las comunidades locales, indígenas y campesinas. En el marco de estos esfuerzos, es necesario brindar capacitación a familias campesinas que habitan en zonas de interés turístico, para que puedan diversificar sus actividades productivas, respetando la autonomía de los pueblos y procurando una buena planificación para evitar el turismo de masas y un choque cultural que pueda alterar el bienestar de las comunidades.
- Brindar apoyo prioritario y promover el desarrollo de redes de comercio justo de servicios turísticos, así como fortalecer los programas de asistencia técnica y capacitación dirigidos a las micro y pequeñas empresas turísticas para la comercialización de sus productos, incluyendo el aprovechamiento de plataformas en línea y nuevas herramientas tecnológicas. Estas medidas son urgentes ante la reformulación de los sistemas turísticos durante y después de la pandemia.
- Integrar los esfuerzos de consolidación del Programa Nacional de Corredores Biológicos a cargo del SINAC con las iniciativas de promoción turística de los gobiernos locales, para fomentar el desarrollo de corredores biológicos urbanos. Es necesario aprovechar el gran potencial que tienen estas áreas, para dinamizar la generación de fuentes locales de trabajo, mediante la prestación de servicios turísticos y recreativos; además de mejorar la calidad de vida de la población.
- Presentar una propuesta de reforma integral a la Ley Reguladora del Polo Turístico Papagayo, con la finalidad de devolver a las municipalidades de los cantones guanacastecos de Carrillo y de Liberia la administración de sus mejores playas y promover la distribución equitativa de los beneficios del desarrollo turístico hacia las comunidades locales. Esta iniciativa será consensuada con los gobiernos locales y las fuerzas vivas de estos cantones. Igualmente, se continuará impulsando la iniciativa para los concesionarios de Papagayo paguen el canon por el uso de bienes de dominio público, según el valor real de las propiedades que ocupan (expediente 18.072)
- Continuar apoyando la lucha de las comunidades costeras para consolidar su derecho a permanecer en los territorios que han habitado históricamente y mejorar sus condiciones de vida, a partir del desarrollo de actividades productivas sustentables como el ecoturismo. A través de procesos participativos de consulta a las comunidades, se reactivará la propuesta de una nueva Ley de Territorios Costeros Comunitarios y se promoverán alternativas para resolver el problema jurídico de tenencia de la tierra con una visión de justicia social y ambiental, como la Ley del Refugio de Vida Silvestre de Ostional (9348).
- Continuar apoyando los esfuerzos para la compra y readecuación de las deudas y financiamiento de proyectos de reactivación económica por medio del Sistema de Banca para el Desarrollo, para personas pequeñas y medianas empresarias turísticas afectadas por crisis económicas locales y condiciones adversas de los mercados internacionales
- Impulsar la creación de un Colegio de Profesionales de turismo, con la finalidad de crear un ente público que ampare a la creciente y consolidada comunidad académica del sector, de tal manera que exista un respaldo gubernamental que vele y defienda el adecuado ejercicio profesional.
- Impulsar alianzas entre las instituciones educativas públicas (INA y universidades públicas) que ofrecen formación académica en turismo, para facilitar el proceso de otorgamiento de licencias de guía turístico.
- Modificar el plan de estudios de turismo para secundaria, disminuyendo las horas del enfoque en hotelería e incorporando temas como otros tipos de turismo y planificación turística. Es necesario que se promueva un aprendizaje más amplio del sector y sus diferentes áreas y
- Impulsar la creación de la oficina de Gestión turística en las Municipalidades, de manera tal que exista un correcto manejo y planificación turística en los diferentes cantones a nivel nacional.
- Comprometer a instituciones a desarrollar proyectos de la mano con el ICT, asociaciones, cámaras de turismo y pequeños y medianos empresarios turísticos en el abordaje de propuestas, capacitación y desarrollo del turismo.
- Comprometer a las grandes transnacionales turísticas, a realizar encadenamientos con productores locales, con el fin de dinamizar la economía y aprovechar esos recursos económicos y productivos para reducir la fuga de capital y los desplazamientos de comunidades.
- Impulsar que pequeñas y medianas empresas estén registradas ante el ICT y garantizar el acompañamiento adecuado así como los beneficios de ser parte de dicha institución, pues actualmente el porcentaje de empresas turísticas registradas es muy bajo.